Sergio “Marvel” Martínez Contó cómo pasó de practicar fútbol a entrenar en pugilato. Por otra parte, afirmó que estaba en la profesión equivocaday terminó teniendo una carrera triunfal.
Durante una entrevista para sencillo no cuenta, sergio martinez detalló su vida como atleta y la transición de una disciplina a otra. Se aventuró en su trabajo contemporáneo solo para mejorar su condición física.
“¡Estaba en la profesión equivocada! Pero al final acerté”, dijo. “Ingresar a un recinto de pugilato, para mí, fue lo mejor que me pudo suceder pasado. Venía de insistir mucho tiempo en querer ser futbolista”. las competiciones, pero tenía mucha más afinidad con los deportes individuales”.
Martínez Considero el deporte una filosofía de vida. Desde pequeño fue activo y practicó varias actividades, hasta que encontró su media naranja o mejor, el otro mitón de su par.
“De chiquillo practiqué frontón, tenis y ciclismo, y luego pasé al fútbol. En todos quise ser profesional, pero no pude por determinadas situaciones. Cuando empecé a entrenar fútbol me volví irreflexivo buen argentino que soy. Nunca entendí la diferencia entre familia e individuo.“, él continuó.
Maravilla Martínez tuvo complicaciones en el fútbol, no en el pugilato
sergio martinez tenía más virtudes que defectos, pero había una barrera que nunca podría cruzar. Los deportes de equipo requieren confianza, y él nunca ha podido infundir eso en sus compañeros de equipo.
“Todos los entrenadores me querían porque tenía aire más que aptitud“el dijo. “Eso me gustó mucho, incluso más que mi sagacidad. Me costó fiarse en todos mis compañeros, confiaba en tres o cuatro de un equipo de merienda”.
UNA maravilla martínez su vida cambió el día que iba a audicionar para su primer equipo de fútbol.
“Un día hice una recital para un muy buen equipo de fútbol”, recuerda. sergio. “Me iban a hacer la prueba el 4 de junio de 1995 y estábamos a fines de abril, el sábado 29 de abril. Dije que iba a un recinto de pugilato porque tenía un tío que todavía es preparador de pugilato. Así que pensé en ir al recinto de pugilato tres veces a la semana y tres veces a la semana jugaría al fútbol solo, porque el campeonato terminó. Quería entrenar en el recinto de pugilato de mi tío. Nunca salí de allí”.
sergio Dice que cuando fue al recinto de pugilato por primera vez, se enamoró del pugilato y el fútbol comenzó a suceder a un segundo plano.
“Fui al recinto de pugilato un día, y al día ulterior volví, y al día ulterior sabía que iba a ser pugilista profesional, sabía que yo iba a ser campeon del mundo“, Explique Asombroso. “Estaba seguro de que lo haría. No tenía ninguna duda. Un campeón se construye día a día, y sabía que iba a conseguir eso. Estaba contribuyendo a mi pasión y aire entrenando. Me volví irreflexivo con el pugilato, porque me di cuenta de que era bueno en eso. No tengo talento, pero algunas cosas las entiendo. En el pugilato, si aprendes dos o tres cosas, puedes ser campeón mundial. Y los aprendí proporcionadamente”.
Entre Martínez y el pugilato fue simpatía a primera sagacidad. Desde que había entrado en el engorroso donde trabajaba su tío, había olido el éxito y lo perseguía como un cebo. Esa tarde empezó a ingresar.
Asombroso No es el único gladiador que ha incursionado en el fútbol, y más si nos referimos a las grandes leyendas del pugilato argentino. Cada uno de ellos tiene su corazón con colores proporcionadamente definidos.
Maravilla Martínez pasó del fútbol al boxeo por accidente: “Me equivoqué de profesión”