-
El Gobierno recuerda que las familias además pueden optar por pasarse a la tarifa plana sin coste o con un coste “muy bajo”.
-
Existe un Código de Buenas Prácticas en el que los bancos se comprometen a refinanciar la deuda de las familias en dificultades
-
Cerca de 8.000 familias han solicitado la reestructuración de sus deudas hipotecarias. El lado aceptó un tercio de los casos
La resistente subida de las hipotecas a tipo variable está a la reverso de la remate para muchas familias. El índice Euribor se duplicó en solo un mes. Los hogares que revisen con el mes de narración septiembre notarán, de media, 115 euros más en cultura por cada 100.000 euros de hipoteca. ¿Qué puede hacer una casa con problemas frente a este aumento? Las opciones se reducen básicamente a tres:
- Reduzca otros gastos o extraiga ahorros.
- Cambiar a un préstamo de tasa fija.
- Pide al lado una refinanciación de la hipoteca para aminorar el aumento de las cuotas.
El problema de la primera opción, aminorar gastos o eludir moneda, es que no está al inteligencia de todos. Los salarios crecen, en promedio, cuatro veces menos que los precios y el moneda ahorrado se concentra más en los ingresos altos. En muchos hogares, se reduce la capacidad de hacer frente a circunstancias imprevistas. Sólo quedan otras dos alternativas.
Ir a tarifa plana
El tipo fijo es ahora la referéndum mayoritaria a la hora de firmar nuevas hipotecas. El 73% de las compras de vivienda financiadas optan por esta modalidad. Supone un alteración total en el mercado porque eran prácticamente residuales hasta hace unos primaveras.
Sin confiscación, su peso en la deuda total acumulada por los hogares no es muy elevado. Los hogares tienen 520.000 millones en hipotecas y aproximadamente de 400.000 millones en deuda a tipo variable. En otras palabras, la anciano parte de la deuda hipotecaria se revisará al acrecentamiento.
No todos los créditos son iguales. Ayer de que estallara la burbuja inmobiliaria, las condiciones hipotecarias eran muy buenas. Se vendieron con diferenciales como: Euribor + 0,50%. “Estos créditos no sufrirán tanto”, explica. Patricia Suárez, presidenta de la asociación ASUFIN. “Pero hay hipotecas contratadas entre 2013 y 2015 a tipo variable con márgenes muy superiores y que ya deberían haberse cambiado a tipo fijo”.
El propio Gobierno recordó esta posibilidad de acontecer a tipo fijo. “Esto no es cero nuevo”, dijo Nadia Calviño en una entrevista con TVE. El vicepresidente crematístico recordó que desde en 2019 se modificó la Ley Hipotecaria para que los ciudadanos puedan acontecer “fácilmente” de una hipoteca a tipo variable a una hipoteca a tipo fijo “sin coste o con un coste muy bajo”.
- Para los bancos es ahora el producto destino, por lo que la ofrecimiento es amplia.
- Suceder a fijo ciertamente no supondría un gran hucha en cuanto a la revisión del crédito variable, pero sí sería una defensa frente a posibles nuevas subidas del Euribor.
- “Nuestra recomendación es cambiar a una tarifa plana. Llevamos dos primaveras diciendo esto. Todavía hay tarifas fijas competitivas y debemos compararlas con otras entidades, pero debemos tener cuidado en esta transición”, enfatiza Suárez.
Hay tres posibilidades, explica el presidente de ASUFIN:
- Innovación con el mismo lado. Comercio con nuestra entidad. “En este caso, es posible que presionen para fidelizar a los clientes”, explica Suárez.
- subrogación con otro lado que nos ofrece mejores condiciones que la novación de nuestra entidad.
- Derogar y contratar un nuevo crédito.
Las dos primeras opciones son las de pequeño desembolso asociado.
Solicitar una refinanciación
El sector financiero firmó un Código de Buenas Prácticas en 2012 que sigue vivo. Este acuerdo implica una reestructuración de la deuda de familias vulnerables. Para acogerse a esta medida se deben cumplir una serie de requisitos establecidos en la norma. Entre ellos:
- que se trate de Vivienda habitual.
- Esa parte del crédito exceder el 50% de los ingresos de la tribu.
- Que los ingresos familiares no superen tres veces el indicador IPREM. Hasta 2022, este cálculo rondaría un mayor de 1.737 euros al mes de ingresos.
- Que a la situación económica ha cambiado en los cuatro primaveras anteriores.
Desde que se puso en marcha este mecanismo, 130.000 familias han pedido que se nivele el aumento de sus facturas. Más o menos de la parte de ellos recibieron reestructuración por parte de los bancos. “ahora que vamos ver si es necesario reforzar estos instrumentos para apoyar a las familias que puedan tener alguna dificultad”, explicó Calviño sin dar más detalles.
En total, el año pasado se presentaron al lado casi 8.000 nuevas solicitudes, una sigla muy desaparecido si comparamos su crecimiento en el pasado. Lo que bajó es la tasa de éxito: solo se aprobó el 30% del total. Los motivos de la denegación son variados, pero “principalmente se debió a que el solicitante no cumplía los requisitos exigidos en la norma”, explica el final referencia sobre este Código de Buenas Prácticas enviado al Congreso.
Todavía no sabemos cuál es la crecimiento de los pedidos en este 2022. La caída en las aceptaciones durante el final año puede deberse a que los criterios son demasiado estrictos. Pero ni el Gobierno ni el sector bancario confirman cambios al respecto. En el sector financiero señalan que “hacen descuido más datos”. Aún así, dicen, es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre la situación.