Este películas británicas Puede que no haya sido un gran éxito constante a lo largo de la historia de Seventh Art. Pero no se puede negar que ha renunciado al gran cine, especialmente a la gran comedia con un toque de humor británico, tanto personal como universal, y algunos han sabido explotar esta paradoja (imposible Can’t Remember Monty Python).
En este caso, cuando la gente habla de edgar wright, el cineasta británico ha conseguido asentar su propio subgénero en el cine de acción y comedia, con un toque de absurdo que acerca en ocasiones sus propuestas a la sátira.Sí policía caliente Es una de sus representaciones más acertadas y, sobre todo, la obra más lograda de la carrera de Wright.
La película está protagonizada por el gran (y controvertido) Simón Pegg Y Nick Frost, escrito por los mismos Pegg y Wright, cuenta la historia de un policía eficiente que es llevado a un tranquilo pueblo inglés porque sus colegas sienten que su desempeño laboral los hace quedar mal. Allí, lo ubican junto a Danny, un policía poco profesional que sueña con vivir en una de las muchas películas de acción que anhela. Una peculiaridad del guión de Hot Fuzz cambia la asociación policial original: la relación entre policías puede ser algo clásica, pero todo el elenco llena la película con situaciones que son tanto divertidas como inusuales.
Así es como el famoso policía londinense comenzará a investigar una serie de asesinatos que el pueblo insiste en que son solo accidentales porque es un pueblo absolutamente tranquilo. Y con eso, el acto de violencia con el que Danny soñaba finalmente llega… incluso si no resulta como él quiere.
policía caliente Fue un éxito absoluto el año en que se estrenó en 2007. Se convirtió en una película de culto por su propuesta dramática y original. Tenía un presupuesto relativamente pequeño (8 millones de libras esterlinas), recaudó casi 100 millones de dólares solo con funciones comerciales en cines y cautivó al público con su banda sonora, reproducida en su país de origen y en el extranjero. A NOSOTROS.
netflix Luego está esta opción, un clásico absoluto del cine británico, que no debe perderse ni en un segundo o tercer visionado.
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