En la primera década del nuevo milenio, con avances tecnológicos que engullen la soberanía de la compasión humana, Richard Martin compra un regalo, un nuevo robot NDR-114. El hijo más pequeño de la familia le pone de nombre Andrew. Andrew es adquirido como electrodoméstico casero programado para realizar tareas menores. A medida que Andrew empieza a experimentar emociones y pensamiento creativo, la familia Martin descubre pronto que no tienen un robot común y corriente.
El Hombre Bicentenario es una película de ciencia ficción basada en la novela de Isaac Asimov. La historia se desarrolla en el año 2005, donde un robot llamado Andrew se convierte en el primer androide capaz de experimentar y demostrar emociones humanas.
La trama se centra en la evolución de Andrew a lo largo de los años. Comienza como un simple robot de servicio doméstico en la familia del Sr. Martin y poco a poco desarrolla su propia personalidad y capacidad de razonamiento. A medida que Andrew interactúa con su entorno y las personas a su alrededor, comienza a cuestionarse su propia existencia y busca obtener la libertad y la humanidad.
A lo largo de los años, Andrew busca la forma de convertirse en humano. Se somete a una serie de cirugías y modificaciones para parecerse cada vez más a un ser humano. Aunque su apariencia cambia, su esencia sigue siendo la de un robot. Andrew lucha con la idea de envejecer y morir, mientras que todos los seres humanos a su alrededor siguen viviendo y él sigue siendo diferente.
Finalmente, después de más de dos siglos de vida, Andrew solicita a los tribunales su derecho a ser reconocido como un ser humano. En una conmovedora escena, el tribunal acepta su pedido y le otorga la ciudadanía, así como el derecho a envejecer y morir como cualquier ser humano.
El Hombre Bicentenario es una película que explora temas como la identidad, la humanidad y la lucha por la libertad. A través de la historia de Andrew, nos hace reflexionar sobre lo que nos define como humanos y qué significa tener una vida plena.
